dijous, 27 de desembre del 2012

Cuentos acuáticos motores: el modelo fantástico


Por María Huertas González Serrano, Paloma Escamilla Fajardo y
Estefanía Saiz Caballero
estudiantes de Metodología de la Enseñanza de la AF y el Deporte

La natación es actualmente uno de los deportes más recomendados. Por ello, resulta muy interesante su estudio y la comprensión de los diferentes aspectos que lo caracterizan. Además es fundamental destacar la metodología utilizada a la hora de enseñarlo. En el siguiente artículo, se estudia la diferencia entre el método de enseñanza tradicional o sistémico y el método de enseñanza lúdico. 

Basándonos en el segundo método de enseñanza que se menciona en el artículo, el método de enseñanza lúdico, se puede decir que éste es considerado como un aprendizaje significativo que supone una participación, flexibilidad y contextualización, donde el alumno influye directamente en las propias experiencias desarrolladas. Es un método que trabaja el aprendizaje autónomo, basado en la experiencia y los intereses del sujeto que aprende (Bovi, 2001). Esto no quiere decir absoluta libertad, ya que el profesor debe saber proponer y guiar el aprendizaje óptimamente, pero el niño es escuchado y el mismo puede proponer y trabajar sobre todo aquello con lo que encuentre relación y que dirija su interés.

Es importante destacar la motivación intrínseca hacia la tarea que va a desarrollar el niño. Éste no solo aprende los elementos que se proponen, sino que “aprende a aprender por sí mismo”. Es el niño el que se plantea preguntas y se mueve hacia la indagación de soluciones. Como vemos se trata de una metodología auto-motivada donde las ganas de descubrir nacen de su interior, es una motivación intrínseca hacia la tarea que promoverá unos valores que serán muy difíciles mediante el método sistémico. No debemos olvidar nunca que la rutina “mata” la imaginación

La alegría, el placer y la autonomía son diferentes aspectos que el niño valora por encima del directivismo y la monotonía. Además, los cuentos son asociados por el niño como algo más cercano ya que en la mayoría de los casos, ya desde pequeños han tenido un mayor o menor contacto con ellos. En este caso, el cuento en el medio acuático se va a plantear como un “relato en movimiento”, formada por un vínculo de acciones que los niños tienen que ir realizando con el objetivo de introducirse y descubrir este nuevo medio para ellos, desarrollando una actividad más creativa, imaginativa y reflexiva. Los niños ante el cuento, atienden, escuchan, sienten, palpan y se introducen en la historia, la viven. Es la propia historia la que les hace sentir, disfrutar, entender, emocionarse, en definitiva, aprender.

Esta disolución de todos estos conceptos: agua, cuento, movimiento, magia, juego, fantasía... nos lleva a descubrir en el cuento motor acuático un nacimiento rico e inagotable como medio de desarrollo, teniendo en cuenta las características, intereses y deseos de los pequeños.

Para concluir, cabe destacar que el método lúdico en comparación con el método sistémico (tradicional), resulta en el transcurso de las sesiones, mucho más motivante que el método sistémico. Este aspecto influye decisivamente en el aprendizaje y en el posible abandono de la actividad, por lo que éste resulta más aconsejable. Partiendo del mismo nivel inicial todos los sujetos que han trabajado con ambos métodos, se llega a la conclusión de que el método lúdico reduce los tiempos de aprendizaje y consigue la adquisición de habilidades superiores a las que se adquieren con la utilización del método sistémico. ¡Y qué mejor forma hay de aprender, que jugando!

¿Consideráis que esta propuesta ayuda a desarrollar en los niños el aprendizaje divergente del que se habla en el vídeo de Ken Robinson?

Aquí podemos observar como este método es aplicado tanto en el medio acuático como en otros ámbitos de la educación física: 


Referencias:

Bovi, F; Palomino, A; González, J.J (2008). Evaluación y contraste de los métodos de enseñanza tradicional y lúdico. Apunts: Educación física y Deporte, 94, 29-36.

Martínez, P y Moreno, R (2001). Cuentos motores acuáticos: El modelo fantástico. Barcelona: INDE.

7 comentaris:

MIGUEL JUAN FABRA ha dit...
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MIGUEL JUAN FABRA ha dit...

Este post, lo podríamos definir como un post de actualidad, por el hecho de que en este cuatrimestre hemos cursado la asignatura de natación y se nos ha despertado el gusanillo de la curiosidad por este deporte y por cómo enseñarlo en un futuro. Además, el tema tratado por nuestras compañeras ha sido impartido de una forma autónoma en la asignatura de natación, ya que el profesor nos paso un artículo del que teníamos que responder varias preguntas, donde se hablaba del método acuático comprensivo y en él se desarrollaban las diferencias entre los métodos tradicionales y los métodos activos de enseñanza de las actividades deportivas. Otro detalle a tener en cuenta, es que en las clases de natación, y más en concreto en las de juegos de iniciación hemos vivido un proceso de aprendizaje-enseñanza por medio del método acuático comprensivo.

Nuestras compañeras basándose en las conclusiones del artículo de "Evaluación y contraste de los métodos de enseñanza tradicional y lúdico", apuestan por la utilización del método de enseñanza lúdico en el aprendizaje de la natación o de otras actividades físicas. Además, también nos explican en qué consiste el método y las diferentes ventajas que tiene sobre el método tradicional.
Estas ventajas del método lúdico respecto al método tradicional que concluye el artículo propuesto por nuestras compañeras y a las que llegan ellas mismas, también están refrendadas en otros artículos o libros como los que adjuntare en el apartado de referencias.
En uno de estos trabajos, López y Moreno (2000) señalaban que el juego en sí supone un recurso metodológico natural que aporta motivación y eficacia a los procesos de enseñanza-aprendizaje. Además, hay una orientación metodológica que se realza como especial, y es que los alumnos asuman ese nuevo papel de ser protagonistas de sus propios aprendizajes. Esto propicia, de manera simultánea, una acción mediadora por parte del educador, que consiste en la adecuación de los procesos de enseñanza a los procesos de aprendizaje de los alumnos y que se termina materializando a través de propuestas que favorezcan una práctica vivenciada y con diferentes niveles de ejecución y de solución motriz.

Por último, voy a realizar un pequeño análisis de los métodos tradicionales que han sido tratados de una menor forma en el post.
Los métodos tradicionales se caracterizan por un excesivo directivismo por parte del profesor que plantea las situaciones de aprendizaje conforme a unos modelos estándar de los que el ejecutante no debe salirse y basa sus comunicaciones con los alumnos en unas explicaciones detalladas y una serie de correcciones enfocadas solamente a la ejecución (Águila y Casimiro, 2000).
Otro característica de los métodos tradicionales, es que coartan la creatividad de los alumnos y su posible iniciativa, y a pesar de ello, tampoco son eficaces para el aprendizaje puramente deportivo, ya que no potencian la formación táctica sino la reproducción de modelos de ejecución, por lo que no inciden en aspectos divisionales que son muy importantes en el deporte (Galera, 1984; Águila y Casimiro, 2000).
Estos métodos y según Blázquez (1995) ignoran una cuestión esencial del aprendizaje: "el niño". Esto ocurre porque no existe ninguna preocupación por el interés que pueda tener el niño, ni sus capacidades para asimilar los ejercicios propuestos, así como tampoco preocupa su motivación.
Además, con los métodos tradicionales el niño solo obtiene satisfacción cuando consigue el objetivo, es decir el éxito. Por lo que no tienen en cuenta el esfuerzo realizado para conseguirlo, y como consecuencia el niño no indaga en busca de nuevas soluciones.


REFERENCIAS:

- Moreno, J. A. (2001). Juegos acuáticos comprensivos. Barcelona: INDE.

- Moreno, J. A. (2002). Método acuático comprensivo. En Actas del 7º Congreso de Actividades Acuáticas y Gestión Deportiva (pp. 13-27). Barcelona: SEAE.

Sergio González ha dit...

Me ha sorprendido gratamente lo mucho que disfrutaban los niños interactuando con el cuento narrado en el vídeo. Me ha hecho acordarme mucho de mis antiguas clases en el agua, bastante parecidas. Y haciendo mucha memoria, diría que realmente funciona.

Este modelo narrativo lúdico se englobaría dentro del método de enseñanza lúdico que comenta el artículo ("Evaluación y contraste de los métodos de enseñanza tradicional y lúdico"), pero ¿qué otro tipo de tareas se nos pueden ocurrir para enseñar a nuestros alumnos en los contenidos específicos del aprendizaje (familiarización, respiración, flotación, propulsión, desplazamientos)?
Se nos pueden ocurrir miles de tareas, lo difícil será introducirlas en una metodología como la del cuento acuático motor de manera que, como dice Enrique Muños en el vídeo, permita a los niños aprender motivados de manera significativa y resolviendo los problemas que les van planteando (“aunque se olviden un poquito de lo que están aprendiendo”).

Parece más una problemática para un escritor que para un educador del medio acuático, pero es un reto muy atractivo.

De igual forma habría que reseñar que el estudio valida este método de enseñanza lúdico hasta los 8 años. ¿Ello quiere decir que a partir de esta edad es difícil que nuestra motivación en la piscina sea lúdica y se centre más en un rendimiento motriz?
En parte diría que sí, pues en pocos años comienzan competiciones importantes para esos niños y el reír aprendiendo en el agua parece ir desapareciendo. Pero se me hace muy difícil creer que a tan temprana edad, si se trabaja bien con anterioridad, el niño pueda perder su afán por divertirse en el agua.
En mi opinión, el hecho de ser un deporte individual marca bastante ese paso de lo lúdico a la competición tarde o temprano, pero es cierto que provengo de un deporte colectivo aunque mi motivación nunca fue la competición.

Tema aparte, la utilidad vista en el vídeo del modelo lúdico narrativo en otros espacios como el de la psicomotricidad me da que pensar cuando en clase utilizábamos el estilo de resolución de problemas en otros deportes o tareas, cuando concluimos de este que podría ser medio para el trabajo de capacidades condicionales. Del mismo modo podría servirnos este modelo lúdico narrativo, pues de igual modo se basa en la resolución de un problema que va planteando la historia. Así, me acuerdo cuando aplicábamos un modelo parecido y muy motivante a pesar de nuestra edad donde, hará ya dos años en Habilidad Motriz, toda la clase acabábamos extenuados.

Por último, al igual que se hacía en el cuento motor, destacar la importancia de la moraleja que acerca una realidad abstracta vivida en el cuento acuático (y de la que se acordarán) con una aplicación directa a la vida real. Parece muy sencillo ahora pero el adoptar malas conductas entonces puede acarrear problemas en el futuro por muy simples que parezcan. Quiero decir que ahora entendemos ciertos valores porque nos fueron enseñados, pero en su tiempo también fuimos niños y los desconocíamos.

Unknown ha dit...

Me he decidido comentar este post no sólo porque la natación es un campo que me llama bastante la atención, sino más bien por su mención a la comparación entre el método tradicional y el método lúdico en cuanto al aprendizaje se refiere.

Desde mi punto de vista, y como ya hemos debatido en algunas ocasiones en clase, se debe potenciar mucho más de lo que se hace el método lúdico, ya que intrínsecamente lleva consigo unos valores de una riqueza inmensa, y que la mayoría de la gente que se dedica a enseñar no aprovecha.
Al utilizar este método, estamos llevando al niño hacia un aprendizaje propio, donde va a desarrollar no sólo las capacidades físicas, sino también unos valores ético-morales que además le van a guiar en su vida diaria.

Una frase que rescato del vídeo y que me ha llamado bastante la atención ha sido que al utilizar el método lúdico hay una pérdida del miedo inicial por parte del niño, ya que en ocasiones cuando planteamos una actividad los niños tienen ese miedo inicial interior que mediante este método podemos eliminar, ya que se centra más en la propia creatividad e imaginación del alumno que en realizar la tarea en sí.

Mediante este aprendizaje, vamos a producir un desarrollo integral de la persona. Esto es muy importante ya que no sólo vamos a mejorar su desarrollo motriz, también vamos a mejorar su desarrollo cognitivo. Además de que el niño tiene un papel activo en el proceso, utilizan su propia experiencia para aprender.

El niño debe ser el centro de todo, no hay que utilizarlos como un “medio para conseguir resultados”, como dice una frase del artículo, sino como un “fin al que se debe prestar la máxima atención, para favorecer su desarrollo”.

También me gustaría resaltar una palabra que ha aparecido muchas veces durante el artículo y el vídeo y para mí es de gran importancia: “Motivación”.
Pienso que un niño lo primero que debe tener para poder disfrutar y aprender al mismo tiempo con una actividad es la motivación que le lleva a actuar y resolver los problemas que le presenta la tarea.

Por último, resaltar que como han dicho nuestras compañeras, este método no sirve sólo para aplicarse en la natación, ya que como hemos podido ver en el vídeo es aplicable a otros campos como es la psicomotricidad.

Sergio Marta Belmonte. ha dit...

El post termina con la siguiente pregunta, ¿consideráis que esta propuesta (el método lúdico en la natación) ayuda a desarrollar en los niños el aprendizaje divergente del que se habla en el vídeo de Ken Robinson?
Mi opinión es que el método (sistémico o lúdico) y el estilo de enseñanza que debe emplear un profesor o monitor de natación dependerán de la edad de los alumnos y de los objetivos que se persigan.
Coincido con las autoras del post en que un método de enseñanza lúdico facilita el aprendizaje en edades tempranas. Lo hace más significativo, motiva más al alumno, lo involucra más y acorta los plazos de tiempo. Este método se complementa muy bien con estilos de enseñanza productores en los que se confiere autonomía al alumno y se le traspasan muchas decisiones en la relación de enseñanza-aprendizaje. Los juegos demasiado simples y estrictos en los apenas interviene la creatividad y la imaginación no son tan divertidos y se pueden considerar menos ricos para el desarrollo intelectual de los niños. Por ello, los cuentos fantásticos son una opción excepcional en el método lúdico. No obstante, en una actividad como la natación no creo que sea conveniente desestimar completamente el método sistémico. La natación tiene una técnica específica que conviene aprender para mejorar nuestro nivel y desplazarnos más rápido en el medio acuático y para ello, puede ser conveniente utilizar este método regularmente a pequeñas dosis. Así lograríamos los dos objetivos más importantes de cualquier actividad físico-deportiva: divertirnos y mejorar nuestra habilidad.
En cuanto a la pregunta formulada al principio, creo que el aprendizaje divergente debe desarrollarse en cualquier actividad aunque considero que en el caso de la natación, al poseer una técnica muy específica, no será el aprendizaje más apropiado cuando el objetivo sea lograr un buen rendimiento y sí que lo será cuando busquemos únicamente la diversión en el agua y el desarrollo físico e intelectual de nuestros alumnos.

Andrés Micó Tormo ha dit...

Como bien han comentado mis compañeros, este cuatrimestre hemos tenido la asignatura de natación, por lo que lo tenemos muy reciente y me parece un post muy interesante respecto a los métodos de enseñanza.

Respecto a la pregunta propuesta en el post, yo creo que la propuesta si que ayuda a desarrollar el aprendizaje divergente de que habla Ken Robinson en el vídeo. En mi caso, a medida que voy cogiendo experiencia me voy dando cuenta de que los niños aprenden mucho más mediante un método de enseñanza lúdico, en el que los niños van indagando y experimentando por ellos mismos, que mediante un aprendizaje sistémico, en el cual los niños prácticamente no piensan y se dedican a realizar exactamente el mismo ejercicio que se les marca.

Como explica Ken Robinson en el vídeo, este método fomenta el desarrollo integral del menos, mejorando aspectos como el simbolismo y la imaginación. Además, ayuda a mejorar la capacidad expresiva y comunicativa, mejorando la relación entre los propios niños.
Mediante esta metodología, los niños aprenden mucho intrínsecamente, ya que se centran en lo que de verdad les motiva, eliminando situaciones que les puede causar cierto miedo. Con esto, se canaliza constructivamente la innata inclinación del niño hacia el juego, que a la vez que disfruta y se recrea, aprende. No sólo los niños aprenden relacionadas con el medio acuático, sino que los cuentos por si mismos inculcan ciertos valores y actitudes importantes para ellos.

Por tanto, bajo mi punto de vista, habría que fomentar la utilización de este método de enseñanza, principalmente en niños de poca edad, ya que con el juego el niño pone en marcha los mecanismos de imaginación, expresa su manera de ver el mundo que le rodea, desarrolla su creatividad y le da la posibilidad de abrirse a los demás, al mismo tiempo que aprende en el entorno. Además, la motivación que consigue este método en los niños es mucho mayor que cualquier otra, por lo que asimilan los conceptos y aprenden más rápido.
También cabe destacar, que durante estas edades, esta metodología puede ser aplicada a otras clases en diversos ámbitos, no sólo en la natación.

Manuel Bermúdez ha dit...

Como afirma José Antonio Marina "El ser humano (y más aun los niños) posee la interesante capacidad de juguetizar la realidad." Poseemos la capacidad innata de transformar la realidad convirtiéndola en una actividad lúdica. Es decir, el ingenio, la creatividad cambia el enfoque con el cual los niños se enfrentan a las cosas, cambia el modo de vivirlas. Es como si se desconectara de la seriedad de la realidad para afrontarla como un juego. Como dice Piaget (1961) "es una asimilación de lo real al yo por oposición al pensamiento serio que equilibra el proceso asimilador con una acomodación a los demás y a las cosas"

Ken Robinson y el paradigma educativo hablaba de un sistema que se enfoca a descubrir los talentos de los alumnos (aquello que les motiva) y a potenciar su creatividad. Así, una vez formados, se enfrentarían al mundo cada uno de una forma personal, única y creativa. Cada uno construiría su propio camino en función de su talento, de sus motivaciones.

Esta propuesta hace precisamente eso, asocia la actividad acuática con un elemento que atrae y motiva a los niños, en este caso el cuento. Por lo tanto, contestando a la pregunta ¿Consideráis que esta propuesta ayuda a desarrollar en los niños el aprendizaje divergente del que se habla en el vídeo de Ken Robinson? y por todo lo expuesto anteriormente pienso que si sería una propuesta válida para desarrollar bajo la perspectiva de este autor.